No hay palabras para describir lo que uno siente cuando se mete un bocado de este plato en la boca… ¡Supone una explosión de sabores alucinante!

Vamos con los ingredientes, sus cantidades y la forma de elaboración

INGREDIENTES

  • 60 gr de pasta integral
  • 100 gr de puerro
  • 100 gr de espinacas baby (esta variedad es mucho más suave que la normal)
  • 50 gr de salmón ahumado. Si el salmón no te hace gracia, puedes poner una latita de atún al natural o, 40 gr de fiambre bajo en grasa y en sal o bien, 50 gr de tofu o seitán.
  • 50 gr de queso ricotta
  • 1 cucharada de postre de aceite de oliva virgen extra
  • sal y pimienta negra

ELABORACIÓN

  1. En lo que la pasta integral cuece en agua con sal ve partiendo en trocitos pequeños el puerro. Calienta el aceite indicado en una buena sartén antiadherente.
  2. Añade el puerro y déjalo hacer unos 7-8 minutos a fuego medio/alto. La idea es que quede doradito. En ese tiempo parte un poco las espinacas baby y el salmón ahumado. Échalo todo a la sartén con una pizca de sal y pimienta negra y apaga el fuego. Las espinacas reducirán su tamaño (prácticamente se cocinarán al vapor, así tendrán un poco más de consistencia y encima sus propiedades nutricionales se mantendrán mejor que si las cocemos) y el salmón ahumado se hará un poquito también.
  3. Cuando la pasta integral esté (pasados esos 7/8 minutos en los que el puerro está dorándose) retírala del fuego y escurre el agua. Añade en la misma cazuela de la pasta sin agua el preparado de la sartén y añade el queso ricotta. Mezcla despacito y goza.